Casi desconocida producción acerca de una guerra no muy conocida por el público en general.
El 30 de Noviembre de 1939, la URSS invadió Finlandia con 4 ejércitos, que sumaban medio millón de hombres. Todo el mundo suponía que un gigante de 180.000.000 de personas, atacando a un país de tres y medio, que carecía de un ejército moderno, de tanques, de aviones, y de cualquier tropa motorizada arrasaría el pequeño país en cuestión de días.
Pero no fue así.
Fiados de su superioridad, y de que los finlandeses se entregarían por lo intevitable de su derrota, los rusos entraron casi desfilando, y sufrieron enormes bajas. A lo largo de toda la frontera, pequeñas unidades finlandesas, equipadas con esquis, y practicando guerra de guerrilla, derrotaron a varias divisiones soviéticas, luchando en inferioridad de 3 a 1, y obligando a los rusos a repasar la frontera a toda velocidad. En la zona del Istmo de Carelia, zona de paso obligada para el ataque contra la capital, los fineses lograron resistir un mes a dos ejercitos rusos con fuerzas varias veces inferiores.
Aunque, finalmente, Finladia se vió obligada a claudicar por la abrumadora superioridad numérica, y a entregar todo aquello que el dictador Stalin le exigía, la URSS se guardó muy mucho de convertir al pequeño país en otra de sus «Repúblicas Soviéticas», al igual que había hecho con Estonia, Letonia, y Lituania.
La película nos narra los tremendos combates que tuvieron lugar en la linea Mannerheim, entre Helsinki y Leningrado, desde la perspectiva de un soldado finlandés, Martti Hakala, que ve cómo los hombres junto a los que empezó la guerra mueren uno detrás de otro, en un conflicto extremadamente sangriento ( en tres meses de guerra, Finlandia sufrió 23.000 muertos y 45.000 heridos), hasta que llega a un punto en que lo único que le importa es aguantar vivo un día más.
Entrando en los aspectos técnicos, Talvisota fue estrenada en 1989. Hecha en Finlandia, apenas tuvo repercusión en el extranjero. Tanto su director ( Pekka Parika ), como el reparto (Taneli Makela, Vesa Vieriko, Timo Torikka, y otros ) , son desconocidos fuera de su país, pero tanto dirección como interpretación están bastante conseguidas. La primera, sencilla, limpia, clásica. Sin grandes escenas, o momentos espectaculares, pero manteniendo, por lo general, la tensión en el desarrollo de la película. Los actores, especialmente el protagonista, Taneli Makela, son bastante eficaces, aunque en las escenas «de retaguardia» los personajes o están tan bien caracterizados, son más fríos.
La ambientación está muy bien lograda, con el uso de material histórico: tanques, aviones, uniformes, armas…son todas de la época, y tanto los soldados rusos como los finlandeses estan perfectamente caracterizados.
Las escenas de lucha son algo flojas. El director nos ofrece imágenes duras, pero no «durante el combate». Se recrea en las «muertes súbitas cuando nadie se lo espera», muchas de ellas, bastante desagradables. Los combates son un tanto repetitivos en su planteamiento y ejecución, con algunos fallos de bulto ( tal como granadas que se ve que se lanzan, pero no explotan, error que se repite dos veces en una misma escena ) , pero que se atribuyen, más bien, a la poca experiencia del director en temas bélicos, porque las secuencias están bien rodadas.
A destacar la larguísima duracción de la película: Algo más de tres horas. No se hacen largas, pero te obligan a reservar una tarde entera para verla.
En definitiva, una interesante película sobre una guerra no muy conocida. Aunque no da muchos detalles sobre la misma, te permite conocer un episodio bastante desconocido, de la SGM.
Que aproveche.