Las críticas de David P. «Davicine»:
R.I.P.D. Departamento de Policía Mortal
La película, anunciada como una comedia de acción y aventuras sobrenaturales, acaba demostrando que las risas son muy limitadas, la acción proviene de persecuciones y efectos CGI muy vistos, y gran parte de la trama desafía la comprensión.
En R.I.P.D. Departamento de Policía Mortal, Jeff Bridges y Ryan Reynolds encarnan a dos policías enviados por el Departamento de Policía Mortal del Más Allá con el objetivo de proteger el mundo de los vivos de una serie de almas cada vez más destructivas que se niegan a marcharse pacíficamente al otro lado.
El veterano sheriff Roy Pulsifer (Bridges) se ha pasado toda su vida profesional en el legendario Departamento de Policía Mortal tras la pista de seres monstruosos disfrazados de personas normales y corrientes. Desde el momento en que Roy se ve obligado a trabajar con el detective Nick Walker (Reynolds), los dos deben superar sus diferencias para rendir en equipo al más alto nivel. Cuando descubren un plan que podría acabar con la vida en el planeta, estos dos figuras del R.I.P.D tendrán que ocuparse de restablecer milagrosamente el equilibrio cósmico… si no quieren que el túnel al Más Allá empiece a mandar almas furiosas en la dirección equivocada.
Aunque sea una adaptación de la serie de Dark Horse de novelas gráficas de Peter M. Lenkov, la estética y la forma de llevar a la pantalla grande R.I.P.D. Departamento de Policía Mortal resulta como una mera imitación de Los Cazafantasmas y Men In Black, pero sin resultar ser memorable como la primera, ni tan divertida como la segunda. El resultado global parece haber sido realizado con prisas, como si fuera rodada con el primer borrador de un guión descuidado que ha recibido la aprobación para salir adelante.
Bridges aparece caracterizado como un representante de la ley del siglo XIX con un sombrero Stetson, pelo hasta los hombros y un registro vocal proveniente de un relleno de bolitas de algodón en la boca, es decir, repite su papel de Rooster Cogburn en True Grit, aunque sobreactuando tanto, y buscando chascarrillos en clave de humor, que bien podría ser una caricatura de ese personaje.
Reynolds, por su parte, tras grandes papeles como en Buried, ofrece su peor cara, y nunca mejor dicho, pues la ausencia de expresión, de manifestación de sentimientos y de carisma es plausible durante todo el metraje. Vive y muere, y parece que no va con él el asunto.
Destacar que los personajes muertos de ambos, cuando aparecen en la Tierra, lucen otro apariencia, y quizás sean mucho más divertidos y llamativos, pues el carisma del oriental James Hong y la exuberancia de la modelo de Sports Illustrated Marisa Miller son mejor reclamo, y ofrecen algo más diferente de las clásicas películas policiales con parejas muy distintas que inició Arma Letal, pero no ha sabido aprovecharse ese filón para provocar la diversión que falta a la película.
Si al menos los efectos especiales fueran buenos, podríamos decir que estamos ante una película de muertos vivientes, o monstruos que residen en la Tierra, pero ni siquiera ese punto juega a su favor, pues los seres que aparecen como zombies o criaturas moribundas son claramente creados por ordenador, sin dar lugar a pensar que puedan existir, y sin encajar en las escenas en las que hay persecuciones, pues ni la gravedad de los mismos ha sido bien conseguida.
En definitiva, R.I.P.D. Departamento de Policía Mortal es una película que no gustará a los fans de MIB pues no le llega a la suela de los zapatos, pero que tampoco gustará a aquellos que odien la saga de Will Smith, quedando como un mero producto para pasar el rato si no apetece pensar en nada. Destacar tan sólo el pequeño fragmento de «Hey Nineteen» de Steely Dan que se usa en la sala de entrevistas del RIPD, pues el resto debería haber sido enterrado junto a Reynolds en Buried.
¡Qué lástima! Pensé que sería tan buena como MIB… ahora no sé si ir a verla ya son dos críticas negativas.
Yo soy de los que disfruta con MIB, y salí muy defraudado del cine. Para gustos hay colores, pero madre mía…
Pues a mi me gustó. Iba sin espectativas ni ánimos comparativos. Como peli independiente me parece guay: divertida y entretenida.
La he visto condicionado a que iba a ser una porquería y no me ha parecido tan horrenda, aunque estoy totalmente de acuerdo con la crítica de David. 🙂
Sólo añadiría que las anodinas interpretaciones de Mary-Louise Parker y Kevin Bacon son sosas y poco acertadas. ¿Por qué están todos los actores tan inexpresivos?